Como ya habíamos anunciado, el pasado 7 de septiembre celebramos la Junta de Socios de Voota para aprobar las cuentas pero también para algo aún más importante: decidir el futuro de Voota teniendo en cuenta que parece que el modelo de opiniones sobre políticos no acaba de funcionar ni de aportar al debate.
Estuvimos un buen par de horas (más las cañas que siguieron) hablando, proponiendo ideas, discutiendo, explorando caminos, siempre teniendo en cuenta todo lo que nos habéis propuesto en el post anterior. Y a pesar de que no faltaron nuevas direcciones que seguir, nos encontramos con una enorme dificultad: falta quien lleve el timón en la nueva etapa.
François Derbaix, actual presidente de Voota, anunció su intención de ceder el testigo y pasar a un segundo plano. Parece que por ahora falta quien quiera o pueda dedicar el tiempo que necesita Voota para despegar y aportar a la sociedad.
Por eso la decisión que parece inevitable es congelar Voota por ahora. Darnos dos meses, hasta diciembre, para reflexionar, para dar tiempo a que las ideas maduren o para esperar si surge alguna iniciativa que pueda aprovecharse de Voota, siempre que comparta el objetivo con el que nació: fomentar la participación ciudadana en la política.
Si en este tiempo no encontramos una salida, no quedará otra solución que cerrar. Ni siquiera nos queda ahora la ilusión de celebrar las primeras elecciones generales en Voota: no parece que merezca la pena el esfuerzo para la respuesta y la influencia que hemos tenido hasta ahora.
Eso sí, el código de Voota está y estará disponible para cualquiera que quiera aprovecharlo. También la ingente base de datos de políticos que hemos reunido hasta ahora.
Durante este largo periodo de reflexión seguimos abiertos a escuchar nuevas ideas, así que no dudes en dejar cualquier sugerencia en los comentarios o en ponerte en contacto con nosotros.
